¿A ti también te alegra el día una taza de café? Solo con oler el olor, la textura de la espuma y el sabor del grano molido, mmmmmmmh delicioso. Pero la taza también es importante. Clásica, hecha a mano o un souvenir para toda la vida.
“Una taza de café, por favor”, esta taza de café de metal me recuerda a los bares de antaño, esos bares de barrio en los que te puedes pasar una mañana entera hablando con los vecinos o con tu familia.
Lunga vita al caffè.
Dibujo con lápices Faber-Castell Polychromos sobre papel fine art “Arches”.
